La principal emisora opositora de Hungría pierde su última frecuencia

Budapest (Hungría), 14 feb (EFE).- (Imagen: Marcelo Nagy) Quien sintonice esta medianoche el 92,9 de la FM en Hungría encontrará sólo silencio. Klubrádió, una de las últimas voces críticas con el Gobierno ultranacionalista de Viktor Orbán, se escuchará desde mañana sólo en internet, al retirársele la licencia por, por ejemplo, no emitir suficiente música húngara.

"Desde esta medianoche, nuestra programación será transmitida por internet, y hemos pensado con nuestros compañeros que dedicaremos esta tarde a nuestra propia radio" arrancó hoy el locutor Róbert Pálinkás Szücs el programa de 10 horas con el que la emisora independiente más popular saldrá del dial tras casi 22 años.

MANTENER A LOS OYENTES

En la sede de la emisora, en el tercer distrito de Budapest, algunos periodistas preparan los programas de la tarde en un ambiente de calma típico de domingo. Sólo la presencia de numerosos medios que quieren contar las últimas horas en antena de la emisora, muestran que no es un día cualquiera.

"La primera tarea es orientar a los oyentes hacia internet. Parece que tendremos éxito, aunque muchas veces hay que explicarle a cada persona que nos llama cómo y dónde encontrarnos en la red. Esperamos que esta sea una revolución", cuenta Gábor Pataki, redactor jefe de Klubrádió a Efe.

Segundo objetivo: mantener a las 120 personas que forman la plantilla.

La emisora teme que los pocos ingresos que le quedan, al haberle ido retirando la publicidad el Gobierno y muchas empresas cercanas, desaparezcan con el paso a internet.

Actualmente sobrevive con aportaciones de algunos de los más de 200.000 escuchantes que sintonizan cada día los programas de noticias, las tertulias, los espacios de cultura o las charlas con el público, que constituyen una programación que se mantendrá sin cambios ahora en internet.

La salida de las ondas llega después de que la Justicia confirmara la semana pasada la decisión de septiembre del Consejo de Medios, formado por personas leales al Gobierno, de retirarle su última frecuencia.

Ese órgano justificó la medida en varias irregularidades durante los últimos 7 años, como no respetar la cuotas de música húngara que establece la ley o por incumplir la programación en varias ocasiones, entre otras.

"Es vergonzoso que eso pueda suceder", dijo el presidente de Klubradio, András Arató, tras conocer el fallo del tribunal, que aseguró no era una sorpresa pero sí "triste y antidemocrático".

La decisión ha reactivado la preocupación de la Comisión Europea (CE) que ha pedido a Hungría que permita que la radio siga emitiendo.

APOYO DE LA UE

"Ya expresamos nuestra preocupación por la libertad y el pluralismo de los medios en el informe sobre el Estado de derecho, y el caso de esta radio agrava nuestras preocupaciones", ha llegado a decir el portavoz de la Comisión Europea, Christian Wigand.

Más tajante fue la comisaria de Derechos Humanos del Consejo de Europa, Dunja Mijatovic, quien se refirió en Twitter al cierre como "otra voz silenciada en Hungría" y "odía triste para la libertad de prensa".

El Parlamento Europeo tratará en su pleno de marzo la libertad de prensa en Hungría y el caso de Klubrádió.

Klubrádió ha dejado claro que no sólo apelarán contra el fallo, sino que está dispuesto a llevar el caso hasta el Tribunal de Justicia de la Unión Europea.

"Llevaremos el caso hasta donde podamos. Donde podamos defender nuestra causa, hasta que nos devuelvan la frecuencia", asegura Pataki a Efe.

ORBÁN Y LA PRENSA

Poco después de llegar al poder en 2010, la mayoría absoluta de Orbán en el Parlamento aprobó lo que sus críticos llaman "ley mordaza" por limitar la libertad y la pluralidad de los medios.

Desde que Orbán gobierna, el país centroeuropeo ha caído del puesto 23 al 89, de 180 países, en el índice de libertad de prensa de Reporteros Sin Fronteras.

En los últimos años en Hungría se han cerrado, o comprado por empresarios cercanos al Gobierno, medios independientes como el prestigioso diario "Népszabadság" o los portales Index y Origo, que han dejado de ser críticos para seguir la línea ideológica del Ejecutivo.

Klubrádió se ha presentado al concurso abierto para adjudicar de nuevo la frecuencia dejada libre, un proceso que podría alargarse hasta junio.

UNA LARGA BATALLA

El Consejo de Medios ya arrebató a Klubrádió su frecuencia en 2011, aunque pudo volver a emitir meses después tras una sentencia judicial favorable.

Desde entonces, ha perdido varias frecuencias regionales hasta quedarse sólo con la que hoy dejará de funcionar y que llega sólo a Budapest donde, al igual que en otras ciudades, se concentra el voto opuesto a Orbán, frente a su preminencia en el ámbito rural.



IMÁGENES DE LA ÚLTIMA EMISIÓN DE KLUBRÁDIÓ.