El Big Ben rejuvenece para seguir marcando el tiempo a los londinenses

Londres (Reino Unido), 29 mar (EFE).- (Imagen: Guillermo Garrido) La torre de Isabel, conocida universalmente como Big Ben, luce como nueva tras su restauración para seguir sus más de 160 años marcando el tiempo a los londinenses con la puntualidad de la ingeniería victoriana, como comprobó EFE en una visita exclusiva a sus entrañas.

Con casi cien metros de altura y unas esferas del tamaño de un autobús de dos pisos, su belleza y su característico sonido vuelven ahora a cautivar la mirada de transeúntes y cámaras después de cinco años de una cuidadosa restauración.

"Estamos muy orgullosos de lo que hemos logrado", resalta a EFE Ian Westworth, el relojero oficial del Gran Reloj en la sala de máquinas de la emblemática torre londinense, Patrimonio de la Humanidad.

Westworth y su equipo se encargan de que 'Big Ben' -el nombre que recibió originalmente la campana mayor- despierte de su letargo a cada hora en punto, mientras que sus cuatro hermanas repican cada cuarto.

IMÁGENES DE LA TORRE DE ISABEL, BIG BEN Y ALREDEDORES. INCLUYE DECLARACIONES DE IAN WESTWORTH, RELOJERO DEL PALACIO DE WESTMINSTER.

Traducciones:

1.- "Me llamo Ian Westworth, relojero del Palacio de Westminster y detrás mío tengo el reloj de Westminster. Tiene tres tareas distintas".

2.- "En este final, el engranaje opera la gran campana o el Big Ben, suena a las horas; el del medio es el que da la hora; y éste da los cuartos: cuatro toques a y cuarto; ocho, a las y media; doce, a menos cuarto y dieciséis justo antes de la hora".

3.- "Nos permiten mantener el reloj más o menos dos segundos de tiempo".

4.- "Y para mantenerlo preciso lo que hacemos es poner unos pesos. Tradicionalmente utilizamos monedas de céntimo antiguas (anteriores a 1978), que colocándolas en el péndulo aceleran el reloj en dos quintos de segundo en veinticuatro horas".

5.- "Si el reloj se retrasa, añadimos un céntimo; si se adelante, le retiramos. El tiempo se coge desde la primera campanada de Big Ben".

6.- “Todo tipo de cosas afectan al reloj: el tiempo fuera, incluso el día y la noche, las mareas (del Támesis), cada pequeña cosa afecta al reloj, cada pequeños ajustes que sin corregirlos cada día serían un problema para nosotros".

7.- “Estamos detrás de las esferas, tienen 324 paneles de cristal en cada una de las esferas y todos han sido cortados artesanalmente y renovados. Tienen una plantilla hecha a mano, que cortan para asegurarse de que cada pieza encaje exactamente".

8.- “Hace 160 años no tenían electricidad, por lo que el sereno solía subir estas escaleras y encendía las lámparas de gas, permanecía toda la noche vigilando que estuvieran encendidas y no causaran explosión alguna”.

9.- "Reconozco que podrías conducir aquí un autobús de dos pisos, ¿cómo lo han conseguido?, no lo sé, pero tenemos escalas ¿verdad?".

10.- "En el medio tenemos a Big Ben, pesa como unas 13’5 toneladas y sólo suena a las horas, descansa el resto del día, sólo en las horas en punto".

11.- “Tuvimos el honor y el privilegio de ser llamados Torre de Isabel, en honor a la difunta reina".

12.- “La torre lleva el nombre de la reina, aunque ella nunca llegó a visitarla. Otros miembros de la familia real, sí, pero la reina, nunca. Una lástima, creo que le hubieran gustado las vistas".

13.- “Estamos muy orgullosos de lo que hemos logrado, cinco años de restauración para conseguir que la torre y el reloj luzcan tan perfectos como sea posible".

14.- “Es un verdadero privilegio disfrutar el trabajo que tengo; y estoy orgulloso de, en unos años, pasar el testigo a la siguiente generación su cuidado, con suerte, para los próximos 160 años".