RAPHAEL: “AVA GARDNER Y YO FUIMOS PAREJA DE HECHO”

-- “Juntos, los dos estábamos muy bien, gracias a Dios (…) Ten en cuenta que yo era un pimpollo y estaba bastante bien, y ella no estaba mal todavía. Salimos más de un mes y más de dos”





-- “Natalia todavía no existía en mi vida. Luego lo entendió perfectamente. Son cosas que uno hace cuando tiene cierta edad, y nada, todo bien. Ha habido más… y más famosas que Ava”





-- La clave de llevar 28 años casados con Natalia Figueroa: “Es una cuestión de suerte y hay que trabajárselo: partir de cero todos los días y mostrar el mismo entusiasmo que el primero, por parte de los dos. Somos unos padres fenomenales. De unos padres fenomenales salen unos hijos fenomenales: son copia de los padres, no es el colegio”



RICARDO ALBILLOS

CM EFE-REPORTAJES

Raphael aparece muy puntual, justo a la hora en la que nos había citado, un dato inusual en un artista de prestigio tan contrastado, lo que significa que no se le ha subido a la cabeza ni la fama ni el éxito ni ninguna de esas adherencias negativas que suelen atesorar los famosos.

Raphael lleva el pelo largo, muy largo, algo que justifica con insistencia, “Me lo exige el musical en el que hallo inmerso, “Jekyll y Hyde”, y lo dice con un punto de suave coquetería. Por otro lado, el artista rehuye alguna vinculación con cualquier tipo de amaneramiento, pero continúa moviendo las manos de una manera muy barroca y algo pomposa, y se retoca el pelo constantemente, aunque según él sólo se trata de una manía transitoria.

Vive a las afueras de Madrid, en una casa que se hizo llena de arcos y curvas en 1975, y sus estancias están cuajadas de recuerdos, de fotos, de su colección de iconos, de su piano en el que no le gusta ser fotografiado.

Lleva dos meses ensayando “Jekyll y Hyde”, en sesiones...