Las peleas de gallos, una afición milenaria que se resiste a desaparecer

En casi toda América, en varios países de Europa, África y Asia, aún se cultiva la afición por los gallos de pelea, una tradición que roza con la devoción.

DESTACADOS:.

-- Grupos defensores de los animales buscan la desaparición de las peleas de gallos, al considerar que son prácticas anacrónicas que violan los derechos más básicos de la víctimas: "no ser maltratados" ni "morir por simple diversión" de los humanos.

-- Quienes las defienden, sostienen que la muerte de un gallo de pelea es "más digna" que el sacrificio de miles de pollos en las plantas avícolas.

-- Picotazos, gambetas, revuelos y aletazos forman parte de una buena pelea, aunque lo son también las muecas, gritos y ademanes de los aficionados.

Pinturas, ilustraciones y otros documentos ubican a los gallos de pelea en China hace unos 2.500 años. También en la antigua Roma, la de los circos y coliseos donde se sacrificaban otros animales y hasta humanos, se criaba a estas aves, así como en Pakistán, India y Egipto.

España las llevó a América Latina, donde se han mantenido pese a que grupos defensores de los animales buscan su proscripción, al considerar que son prácticas...

En casi toda América, en varios países de Europa, África y Asia, aún se cultiva la afición por los gallos de pelea, una tradición que roza con la devoción.

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-- Grupos defensores de los animales buscan la desaparición de las peleas de gallos, al considerar que son prácticas anacrónicas que violan los derechos más básicos de la víctimas: "no ser maltratados" ni "morir por simple diversión" de los humanos.

-- Quienes las defienden, sostienen que la muerte de un gallo de pelea es "más digna" que el sacrificio de miles de pollos en las plantas avícolas.

-- Picotazos, gambetas, revuelos y aletazos forman parte de una buena pelea, aunque lo son también las muecas, gritos y ademanes de los aficionados.

Pinturas, ilustraciones y otros documentos ubican a los gallos de pelea en China hace unos 2.500 años. También en la antigua Roma, la de los circos y coliseos donde se sacrificaban otros animales y hasta humanos, se criaba a estas aves, así como en Pakistán, India y Egipto.

España las llevó a América Latina, donde se han mantenido pese a que grupos defensores de los animales buscan su proscripción, al considerar que son prácticas...

En casi toda América, en varios países de Europa, África y Asia, aún se cultiva la afición por los gallos de pelea, una tradición que roza con la devoción.

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-- Grupos defensores de los animales buscan la desaparición de las peleas de gallos, al considerar que son prácticas anacrónicas que violan los derechos más básicos de la víctimas: "no ser maltratados" ni "morir por simple diversión" de los humanos.

-- Quienes las defienden, sostienen que la muerte de un gallo de pelea es "más digna" que el sacrificio de miles de pollos en las plantas avícolas.

-- Picotazos, gambetas, revuelos y aletazos forman parte de una buena pelea, aunque lo son también las muecas, gritos y ademanes de los aficionados.

Pinturas, ilustraciones y otros documentos ubican a los gallos de pelea en China hace unos 2.500 años. También en la antigua Roma, la de los circos y coliseos donde se sacrificaban otros animales y hasta humanos, se criaba a estas aves, así como en Pakistán, India y Egipto.

España las llevó a América Latina, donde se han mantenido pese a que grupos defensores de los animales buscan su proscripción, al considerar que son prácticas...

En casi toda América, en varios países de Europa, África y Asia, aún se cultiva la afición por los gallos de pelea, una tradición que roza con la devoción.

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-- Grupos defensores de los animales buscan la desaparición de las peleas de gallos, al considerar que son prácticas anacrónicas que violan los derechos más básicos de la víctimas: "no ser maltratados" ni "morir por simple diversión" de los humanos.

-- Quienes las defienden, sostienen que la muerte de un gallo de pelea es "más digna" que el sacrificio de miles de pollos en las plantas avícolas.

-- Picotazos, gambetas, revuelos y aletazos forman parte de una buena pelea, aunque lo son también las muecas, gritos y ademanes de los aficionados.

Pinturas, ilustraciones y otros documentos ubican a los gallos de pelea en China hace unos 2.500 años. También en la antigua Roma, la de los circos y coliseos donde se sacrificaban otros animales y hasta humanos, se criaba a estas aves, así como en Pakistán, India y Egipto.

España las llevó a América Latina, donde se han mantenido pese a que grupos defensores de los animales buscan su proscripción, al considerar que son prácticas...