Paseo por las nubes

El rostro histriónico de Salvador Dalí; los efectos devastadores de la mafia siciliana; el estallido de color de la particular realidad del cántabro Ciuco Gutiérrez y la sensualidad de Marilyn Monroe y el conejito de Playboy, todos en un mismo espacio, sin solución de continuidad, para deleite del ojo humano.

Parece imposible conjugar temáticas y realidades tan distintas, pero el salón internacional de la imagen y el sonido de Barcelona, Sonimag 2003, lo ha hecho, en una idea diferente, atractiva: el espacio visual Art Gallery Olympus.

La excusa no podía ser mejor, un repaso a la historia de la fotografía, una invitación a los sentidos, un paseo por las nubes. Al entrar en la sala, de repente, el rostro, o los mil rostros, que era capaz de adoptar el genial Salvador Dalí. Se trata de quince retratos del artista en gran formato, en blanco y negro, a cargo de "grandes" de la fotografía como Catalá-Roca, Miserachs, Toni Catany, Fontseré o Jordi Socías.

Un Dalí "alocado", en su casa de Portlligat, en 1979, un Dalí sorprendido, también del 79, o el más sorprendente todavía, un Dalí expuesto al sol dejando que una mosca juegue en sus finos y peculiares bigotes. Son algunos de los retratos expuestos.

Las fotografías están salpicadas con sabios, y a la vez retorcidos, pensamientos del artista:...

El rostro histriónico de Salvador Dalí; los efectos devastadores de la mafia siciliana; el estallido de color de la particular realidad del cántabro Ciuco Gutiérrez y la sensualidad de Marilyn Monroe y el conejito de Playboy, todos en un mismo espacio, sin solución de continuidad, para deleite del ojo humano.

Parece imposible conjugar temáticas y realidades tan distintas, pero el salón internacional de la imagen y el sonido de Barcelona, Sonimag 2003, lo ha hecho, en una idea diferente, atractiva: el espacio visual Art Gallery Olympus.

La excusa no podía ser mejor, un repaso a la historia de la fotografía, una invitación a los sentidos, un paseo por las nubes. Al entrar en la sala, de repente, el rostro, o los mil rostros, que era capaz de adoptar el genial Salvador Dalí. Se trata de quince retratos del artista en gran formato, en blanco y negro, a cargo de "grandes" de la fotografía como Catalá-Roca, Miserachs, Toni Catany, Fontseré o Jordi Socías.

Un Dalí "alocado", en su casa de Portlligat, en 1979, un Dalí sorprendido, también del 79, o el más sorprendente todavía, un Dalí expuesto al sol dejando que una mosca juegue en sus finos y peculiares bigotes. Son algunos de los retratos expuestos.

Las fotografías están salpicadas con sabios, y a la vez retorcidos, pensamientos del artista:...

El rostro histriónico de Salvador Dalí; los efectos devastadores de la mafia siciliana; el estallido de color de la particular realidad del cántabro Ciuco Gutiérrez y la sensualidad de Marilyn Monroe y el conejito de Playboy, todos en un mismo espacio, sin solución de continuidad, para deleite del ojo humano.

Parece imposible conjugar temáticas y realidades tan distintas, pero el salón internacional de la imagen y el sonido de Barcelona, Sonimag 2003, lo ha hecho, en una idea diferente, atractiva: el espacio visual Art Gallery Olympus.

La excusa no podía ser mejor, un repaso a la historia de la fotografía, una invitación a los sentidos, un paseo por las nubes. Al entrar en la sala, de repente, el rostro, o los mil rostros, que era capaz de adoptar el genial Salvador Dalí. Se trata de quince retratos del artista en gran formato, en blanco y negro, a cargo de "grandes" de la fotografía como Catalá-Roca, Miserachs, Toni Catany, Fontseré o Jordi Socías.

Un Dalí "alocado", en su casa de Portlligat, en 1979, un Dalí sorprendido, también del 79, o el más sorprendente todavía, un Dalí expuesto al sol dejando que una mosca juegue en sus finos y peculiares bigotes. Son algunos de los retratos expuestos.

Las fotografías están salpicadas con sabios, y a la vez retorcidos, pensamientos del artista:...

El rostro histriónico de Salvador Dalí; los efectos devastadores de la mafia siciliana; el estallido de color de la particular realidad del cántabro Ciuco Gutiérrez y la sensualidad de Marilyn Monroe y el conejito de Playboy, todos en un mismo espacio, sin solución de continuidad, para deleite del ojo humano.

Parece imposible conjugar temáticas y realidades tan distintas, pero el salón internacional de la imagen y el sonido de Barcelona, Sonimag 2003, lo ha hecho, en una idea diferente, atractiva: el espacio visual Art Gallery Olympus.

La excusa no podía ser mejor, un repaso a la historia de la fotografía, una invitación a los sentidos, un paseo por las nubes. Al entrar en la sala, de repente, el rostro, o los mil rostros, que era capaz de adoptar el genial Salvador Dalí. Se trata de quince retratos del artista en gran formato, en blanco y negro, a cargo de "grandes" de la fotografía como Catalá-Roca, Miserachs, Toni Catany, Fontseré o Jordi Socías.

Un Dalí "alocado", en su casa de Portlligat, en 1979, un Dalí sorprendido, también del 79, o el más sorprendente todavía, un Dalí expuesto al sol dejando que una mosca juegue en sus finos y peculiares bigotes. Son algunos de los retratos expuestos.

Las fotografías están salpicadas con sabios, y a la vez retorcidos, pensamientos del artista:...

El rostro histriónico de Salvador Dalí; los efectos devastadores de la mafia siciliana; el estallido de color de la particular realidad del cántabro Ciuco Gutiérrez y la sensualidad de Marilyn Monroe y el conejito de Playboy, todos en un mismo espacio, sin solución de continuidad, para deleite del ojo humano.

Parece imposible conjugar temáticas y realidades tan distintas, pero el salón internacional de la imagen y el sonido de Barcelona, Sonimag 2003, lo ha hecho, en una idea diferente, atractiva: el espacio visual Art Gallery Olympus.

La excusa no podía ser mejor, un repaso a la historia de la fotografía, una invitación a los sentidos, un paseo por las nubes. Al entrar en la sala, de repente, el rostro, o los mil rostros, que era capaz de adoptar el genial Salvador Dalí. Se trata de quince retratos del artista en gran formato, en blanco y negro, a cargo de "grandes" de la fotografía como Catalá-Roca, Miserachs, Toni Catany, Fontseré o Jordi Socías.

Un Dalí "alocado", en su casa de Portlligat, en 1979, un Dalí sorprendido, también del 79, o el más sorprendente todavía, un Dalí expuesto al sol dejando que una mosca juegue en sus finos y peculiares bigotes. Son algunos de los retratos expuestos.

Las fotografías están salpicadas con sabios, y a la vez retorcidos, pensamientos del artista:...