EL PARAISO PROMETIDO: LAS CASAS DEL FUTURO

--- Si se cumplen los pronósticos de los especialistas respecto a las viviendas que habitaremos en el futuro, la vida será un desierto de soledades y aislamiento vital



--- Las lavadoras se pondrán en funcionamiento dependiendo de la carga que lleven, el horno se conectará desde el móvil y el frigorífico avisará de la caducidad de los productos



--- El mobiliario: sofá, sillón, cama, etc., vendrá equipado con bolsas de aire que se inflan a gusto del usuario hasta encontrar la posición de apoyo más confortable y darán masaje terapéutico

¿Cómo viviremos en el futuro?, cuando la domótica facilite tanto las tareas cotidianas dentro y fuera del hogar que no necesitemos más que tocar una tecla o dar una orden verbal al ordenador. Visto así, parece que por fin hemos alcanzado el paraíso terrenal prometido. La vida será cómoda, placentera y llena de felicidad cuando no tengamos que realizar nosotros mismos prácticamente nada para satisfacer las necesidades primarias, imprescindibles para la supervivencia humana.

Cuando podamos disponer de todo el tiempo del mundo para disfrutar de los placeres que más nos gusten. Ese parece ser el mensaje que los fabricantes y diseñadores de la casa del futuro nos quieren vender. La idea con la que intentan seducirnos sostiene que la vida estará totalmente libre de tareas domésticas y de las preocupaciones derivadas de los accidentes propios de cualquier hogar. Naturalmente nada nos dicen de cómo será la vida en soledad dentro de este tipo de vivienda y quiénes tendrán acceso a ellas.

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