09/08/2002 12:00 (UTC)
El programa de televisión “Grand Prix” ha vuelto una temporada más con energías renovadas. Ramón García sigue siendo el conductor habitual, pero en estas labores también le acompaña Oihana, una nueva cara en la pequeña pantalla, llena de vitalidad.
Tiene los ojos grandes y verdes como el mar de su tierra, San Sebastián. Su figura estilizada provoca más de un piropo a su paso, su sonrisa y su conversación pizpireta arrastra como por encanto a todos los que están a su alrededor. Oihana es un torrente de espontaneidad, lo ideal para presentar un programa concurso de la solera de "Grand Prix” al lado de un todo terreno como Ramón García.“Mi nombre tiene varios significados: la bruma que se produce por la mañana cuando se evapora el rocío, bosque o selva”. Esa proximidad con la naturaleza es la que le da energía. “Grand Prix” se ha convertido en un clásico de la televisión, su octava temporada en pantalla así lo atestigua. Este año ha llegado cargado de nuevas pruebas que entrarán en liza con las clásicas como “La patata caliente” o “Los soldaditos”, y no podía faltar una pieza fundamental del programa: la vaquilla, cuya presencia provoca las caídas más acrobáticas de los concursantes. En el programa compiten un catorce pueblos con...
El programa de televisión “Grand Prix” ha vuelto una temporada más con energías renovadas. Ramón García sigue siendo el conductor habitual, pero en estas labores también le acompaña Oihana, una nueva cara en la pequeña pantalla, llena de vitalidad.
Tiene los ojos grandes y verdes como el mar de su tierra, San Sebastián. Su figura estilizada provoca más de un piropo a su paso, su sonrisa y su conversación pizpireta arrastra como por encanto a todos los que están a su alrededor. Oihana es un torrente de espontaneidad, lo ideal para presentar un programa concurso de la solera de "Grand Prix” al lado de un todo terreno como Ramón García.“Mi nombre tiene varios significados: la bruma que se produce por la mañana cuando se evapora el rocío, bosque o selva”. Esa proximidad con la naturaleza es la que le da energía. “Grand Prix” se ha convertido en un clásico de la televisión, su octava temporada en pantalla así lo atestigua. Este año ha llegado cargado de nuevas pruebas que entrarán en liza con las clásicas como “La patata caliente” o “Los soldaditos”, y no podía faltar una pieza fundamental del programa: la vaquilla, cuya presencia provoca las caídas más acrobáticas de los concursantes. En el programa compiten un catorce pueblos con...
El programa de televisión “Grand Prix” ha vuelto una temporada más con energías renovadas. Ramón García sigue siendo el conductor habitual, pero en estas labores también le acompaña Oihana, una nueva cara en la pequeña pantalla, llena de vitalidad.
Tiene los ojos grandes y verdes como el mar de su tierra, San Sebastián. Su figura estilizada provoca más de un piropo a su paso, su sonrisa y su conversación pizpireta arrastra como por encanto a todos los que están a su alrededor. Oihana es un torrente de espontaneidad, lo ideal para presentar un programa concurso de la solera de "Grand Prix” al lado de un todo terreno como Ramón García.“Mi nombre tiene varios significados: la bruma que se produce por la mañana cuando se evapora el rocío, bosque o selva”. Esa proximidad con la naturaleza es la que le da energía. “Grand Prix” se ha convertido en un clásico de la televisión, su octava temporada en pantalla así lo atestigua. Este año ha llegado cargado de nuevas pruebas que entrarán en liza con las clásicas como “La patata caliente” o “Los soldaditos”, y no podía faltar una pieza fundamental del programa: la vaquilla, cuya presencia provoca las caídas más acrobáticas de los concursantes. En el programa compiten un catorce pueblos con...
El programa de televisión “Grand Prix” ha vuelto una temporada más con energías renovadas. Ramón García sigue siendo el conductor habitual, pero en estas labores también le acompaña Oihana, una nueva cara en la pequeña pantalla, llena de vitalidad.
Tiene los ojos grandes y verdes como el mar de su tierra, San Sebastián. Su figura estilizada provoca más de un piropo a su paso, su sonrisa y su conversación pizpireta arrastra como por encanto a todos los que están a su alrededor. Oihana es un torrente de espontaneidad, lo ideal para presentar un programa concurso de la solera de "Grand Prix” al lado de un todo terreno como Ramón García.“Mi nombre tiene varios significados: la bruma que se produce por la mañana cuando se evapora el rocío, bosque o selva”. Esa proximidad con la naturaleza es la que le da energía. “Grand Prix” se ha convertido en un clásico de la televisión, su octava temporada en pantalla así lo atestigua. Este año ha llegado cargado de nuevas pruebas que entrarán en liza con las clásicas como “La patata caliente” o “Los soldaditos”, y no podía faltar una pieza fundamental del programa: la vaquilla, cuya presencia provoca las caídas más acrobáticas de los concursantes. En el programa compiten un catorce pueblos con...
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