25/03/2004 12:00 (UTC)
Ante ella se inclinará todo Hollywood para rendirle homenaje por el 80 aniversario de su nacimiento. Cuando dejó el cine se dedicó a la televisión y a sus discos. Fue quien mejor encarnó al ama de casa de la clase media en la sociedad estadounidense. Hitchcock la consagró como actriz dramática en el filme “El hombre que sabía demasiado”
Considerada la más grande de las actrices de comedia del cine del siglo XX, Doris Day siempre se ha enorgullecido del trabajo que ha realizado en el cine. “Terminar el rodaje de una película, para mí era como el alumbramiento de un nuevo hijo”, aseguró. Su homenaje será diferente, explicó: “No quiero discursos ni alabanzas. En Hollywood nos conocemos todos, y hemos sido lo que somos, seres humanos, por lo tanto con defectos y virtudes. Eso sí, no existen santos entre nosotros. Elegimos una de las carreras más difíciles, y para alcanzar nuestros propósitos hemos tenido que luchar a brazo partido... como en una guerra, pero sin armas”.Es una señora con los pies en la tierra, y a pesar de ser octogenaria, es muy vital, y conserva su capacidad para la emoción. “Ser artista es el don más preciado que la vida pudo darme. Si volviera a nacer sería actriz, y haría las mismas películas. El día que me vaya definitivamente, lo haré cantando, porque dejo un legado cinematográfico con el que he...
Ante ella se inclinará todo Hollywood para rendirle homenaje por el 80 aniversario de su nacimiento. Cuando dejó el cine se dedicó a la televisión y a sus discos. Fue quien mejor encarnó al ama de casa de la clase media en la sociedad estadounidense. Hitchcock la consagró como actriz dramática en el filme “El hombre que sabía demasiado”
Considerada la más grande de las actrices de comedia del cine del siglo XX, Doris Day siempre se ha enorgullecido del trabajo que ha realizado en el cine. “Terminar el rodaje de una película, para mí era como el alumbramiento de un nuevo hijo”, aseguró. Su homenaje será diferente, explicó: “No quiero discursos ni alabanzas. En Hollywood nos conocemos todos, y hemos sido lo que somos, seres humanos, por lo tanto con defectos y virtudes. Eso sí, no existen santos entre nosotros. Elegimos una de las carreras más difíciles, y para alcanzar nuestros propósitos hemos tenido que luchar a brazo partido... como en una guerra, pero sin armas”.Es una señora con los pies en la tierra, y a pesar de ser octogenaria, es muy vital, y conserva su capacidad para la emoción. “Ser artista es el don más preciado que la vida pudo darme. Si volviera a nacer sería actriz, y haría las mismas películas. El día que me vaya definitivamente, lo haré cantando, porque dejo un legado cinematográfico con el que he...
Ante ella se inclinará todo Hollywood para rendirle homenaje por el 80 aniversario de su nacimiento. Cuando dejó el cine se dedicó a la televisión y a sus discos. Fue quien mejor encarnó al ama de casa de la clase media en la sociedad estadounidense. Hitchcock la consagró como actriz dramática en el filme “El hombre que sabía demasiado”
Considerada la más grande de las actrices de comedia del cine del siglo XX, Doris Day siempre se ha enorgullecido del trabajo que ha realizado en el cine. “Terminar el rodaje de una película, para mí era como el alumbramiento de un nuevo hijo”, aseguró. Su homenaje será diferente, explicó: “No quiero discursos ni alabanzas. En Hollywood nos conocemos todos, y hemos sido lo que somos, seres humanos, por lo tanto con defectos y virtudes. Eso sí, no existen santos entre nosotros. Elegimos una de las carreras más difíciles, y para alcanzar nuestros propósitos hemos tenido que luchar a brazo partido... como en una guerra, pero sin armas”.Es una señora con los pies en la tierra, y a pesar de ser octogenaria, es muy vital, y conserva su capacidad para la emoción. “Ser artista es el don más preciado que la vida pudo darme. Si volviera a nacer sería actriz, y haría las mismas películas. El día que me vaya definitivamente, lo haré cantando, porque dejo un legado cinematográfico con el que he...
Ante ella se inclinará todo Hollywood para rendirle homenaje por el 80 aniversario de su nacimiento. Cuando dejó el cine se dedicó a la televisión y a sus discos. Fue quien mejor encarnó al ama de casa de la clase media en la sociedad estadounidense. Hitchcock la consagró como actriz dramática en el filme “El hombre que sabía demasiado”
Considerada la más grande de las actrices de comedia del cine del siglo XX, Doris Day siempre se ha enorgullecido del trabajo que ha realizado en el cine. “Terminar el rodaje de una película, para mí era como el alumbramiento de un nuevo hijo”, aseguró. Su homenaje será diferente, explicó: “No quiero discursos ni alabanzas. En Hollywood nos conocemos todos, y hemos sido lo que somos, seres humanos, por lo tanto con defectos y virtudes. Eso sí, no existen santos entre nosotros. Elegimos una de las carreras más difíciles, y para alcanzar nuestros propósitos hemos tenido que luchar a brazo partido... como en una guerra, pero sin armas”.Es una señora con los pies en la tierra, y a pesar de ser octogenaria, es muy vital, y conserva su capacidad para la emoción. “Ser artista es el don más preciado que la vida pudo darme. Si volviera a nacer sería actriz, y haría las mismas películas. El día que me vaya definitivamente, lo haré cantando, porque dejo un legado cinematográfico con el que he...
Ante ella se inclinará todo Hollywood para rendirle homenaje por el 80 aniversario de su nacimiento. Cuando dejó el cine se dedicó a la televisión y a sus discos. Fue quien mejor encarnó al ama de casa de la clase media en la sociedad estadounidense. Hitchcock la consagró como actriz dramática en el filme “El hombre que sabía demasiado”
Considerada la más grande de las actrices de comedia del cine del siglo XX, Doris Day siempre se ha enorgullecido del trabajo que ha realizado en el cine. “Terminar el rodaje de una película, para mí era como el alumbramiento de un nuevo hijo”, aseguró. Su homenaje será diferente, explicó: “No quiero discursos ni alabanzas. En Hollywood nos conocemos todos, y hemos sido lo que somos, seres humanos, por lo tanto con defectos y virtudes. Eso sí, no existen santos entre nosotros. Elegimos una de las carreras más difíciles, y para alcanzar nuestros propósitos hemos tenido que luchar a brazo partido... como en una guerra, pero sin armas”.Es una señora con los pies en la tierra, y a pesar de ser octogenaria, es muy vital, y conserva su capacidad para la emoción. “Ser artista es el don más preciado que la vida pudo darme. Si volviera a nacer sería actriz, y haría las mismas películas. El día que me vaya definitivamente, lo haré cantando, porque dejo un legado cinematográfico con el que he...
Ante ella se inclinará todo Hollywood para rendirle homenaje por el 80 aniversario de su nacimiento. Cuando dejó el cine se dedicó a la televisión y a sus discos. Fue quien mejor encarnó al ama de casa de la clase media en la sociedad estadounidense. Hitchcock la consagró como actriz dramática en el filme “El hombre que sabía demasiado”
Considerada la más grande de las actrices de comedia del cine del siglo XX, Doris Day siempre se ha enorgullecido del trabajo que ha realizado en el cine. “Terminar el rodaje de una película, para mí era como el alumbramiento de un nuevo hijo”, aseguró. Su homenaje será diferente, explicó: “No quiero discursos ni alabanzas. En Hollywood nos conocemos todos, y hemos sido lo que somos, seres humanos, por lo tanto con defectos y virtudes. Eso sí, no existen santos entre nosotros. Elegimos una de las carreras más difíciles, y para alcanzar nuestros propósitos hemos tenido que luchar a brazo partido... como en una guerra, pero sin armas”.Es una señora con los pies en la tierra, y a pesar de ser octogenaria, es muy vital, y conserva su capacidad para la emoción. “Ser artista es el don más preciado que la vida pudo darme. Si volviera a nacer sería actriz, y haría las mismas películas. El día que me vaya definitivamente, lo haré cantando, porque dejo un legado cinematográfico con el que he...
Ante ella se inclinará todo Hollywood para rendirle homenaje por el 80 aniversario de su nacimiento. Cuando dejó el cine se dedicó a la televisión y a sus discos. Fue quien mejor encarnó al ama de casa de la clase media en la sociedad estadounidense. Hitchcock la consagró como actriz dramática en el filme “El hombre que sabía demasiado”
Considerada la más grande de las actrices de comedia del cine del siglo XX, Doris Day siempre se ha enorgullecido del trabajo que ha realizado en el cine. “Terminar el rodaje de una película, para mí era como el alumbramiento de un nuevo hijo”, aseguró. Su homenaje será diferente, explicó: “No quiero discursos ni alabanzas. En Hollywood nos conocemos todos, y hemos sido lo que somos, seres humanos, por lo tanto con defectos y virtudes. Eso sí, no existen santos entre nosotros. Elegimos una de las carreras más difíciles, y para alcanzar nuestros propósitos hemos tenido que luchar a brazo partido... como en una guerra, pero sin armas”.Es una señora con los pies en la tierra, y a pesar de ser octogenaria, es muy vital, y conserva su capacidad para la emoción. “Ser artista es el don más preciado que la vida pudo darme. Si volviera a nacer sería actriz, y haría las mismas películas. El día que me vaya definitivamente, lo haré cantando, porque dejo un legado cinematográfico con el que he...
Ante ella se inclinará todo Hollywood para rendirle homenaje por el 80 aniversario de su nacimiento. Cuando dejó el cine se dedicó a la televisión y a sus discos. Fue quien mejor encarnó al ama de casa de la clase media en la sociedad estadounidense. Hitchcock la consagró como actriz dramática en el filme “El hombre que sabía demasiado”
Considerada la más grande de las actrices de comedia del cine del siglo XX, Doris Day siempre se ha enorgullecido del trabajo que ha realizado en el cine. “Terminar el rodaje de una película, para mí era como el alumbramiento de un nuevo hijo”, aseguró. Su homenaje será diferente, explicó: “No quiero discursos ni alabanzas. En Hollywood nos conocemos todos, y hemos sido lo que somos, seres humanos, por lo tanto con defectos y virtudes. Eso sí, no existen santos entre nosotros. Elegimos una de las carreras más difíciles, y para alcanzar nuestros propósitos hemos tenido que luchar a brazo partido... como en una guerra, pero sin armas”.Es una señora con los pies en la tierra, y a pesar de ser octogenaria, es muy vital, y conserva su capacidad para la emoción. “Ser artista es el don más preciado que la vida pudo darme. Si volviera a nacer sería actriz, y haría las mismas películas. El día que me vaya definitivamente, lo haré cantando, porque dejo un legado cinematográfico con el que he...
Story content:
Un primer plano restrospectivo de la actriz.
En la película “Josie,la indomable”, el que sería su último trabjao en el cine.
En la película “Josie,la indomable”, la que sería su último trabjao en el cine.
Imagen de Doris Day en su madurez, en 1976.
La actriz es una enamorada de los animales.
Con Rod Hudson, galán con el que rodó varias veces y al que consideró uno de sus mejores amigos hasta su muerte
Con su marido Marty Melcher,en 1965.
En la película “Josie,la indomable”, su último trabjao en el cine.
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