AMPARO MUÑOZ DEBUTA EN EL TEATRO CON "LA HABITACIÓN DEL HOTEL"

--- “Es verdad que la mejor edad para el cine la he perdido. Aunque a veces me lo reprocho, me ha servido de muchísimo para ser tal como soy ahora. Me gusto más ahora que como era antes: lo vivo todo de otra manera, no he parado de buscar y de hurgar en mi vida”

--- “He vivido muy rápido y muchas cosas diferentes. Para actuar, esto me viene muy bien. Por mi carácter, he vivido de forma apresurada. Vivir intensamente, te proporciona una enorme riqueza”

--- “A mí los niños me han gustado siempre muchísimo. Pretendía casarme y tener hijos, educarlos y que ellos me educaran a mí. Eso no pudo ser y ya lo he superado, aunque durante muchos años aquello me causó cierta tristeza” --- “Gracias a la meditación he podido encontrar un sentido de la vida y también una forma de vivir muy importante (…) El budismo me ha hecho tener las cosas mucho más claras. Me ha servido de mucho y ha sido mi mejor medicina”

Ricardo Albillos Im EFE-REPORTAJES

Amparo Muñoz ha regresado a la interpretación. El rostro más hermoso del cine español de los años setenta y principios de los ochenta, después de un parón laboral de dos años, tras los éxitos que cosechó con “Familia” (1997), ha vuelto a embutirse en los aderezos de actriz y, además, se trata de su debut sobre las tablas, por ser su primera representación teatral, “La habitación del hotel”, junto a Blanca Marsillach y Aurora Frías, y la dirección escénica de Manuel Galiana.

Amparo, desengañada de la frágil armadura del éxito, escéptica ante la entidad de sus propios fracasos, retorna al mundo de las bambalinas para quedarse, para forjarse definitivamente como actriz, ahora que por fin le ha sacado gusto a esta profesión que tanto le ofreció y tanto le escatimó.

Se ha instalado en Madrid, después de recalar durante dos años en una aldea valenciana. Vuelve a lo que ella llama “la vorágine”, la capital, el meollo de su oficio, y ya le ofrecen de nuevo proyectos de cine y teatro.

A sus...