Aline Griffith, una elegante espía

La estadounidense Aline Griffith, condesa viuda de Romanones, ex agente de la CIA, desvela en sus memorias , “El fin de una era”, su trayectoria vital, en la que tuvo ocasión de tratar con personalidades como Jackie Kennedy , de quien dice que "era elegante, exquisita y gran conversadora".

DESTACADOS.

--Gracias a mi marido, entablé amistad con Audrey Hepburn, Ava Gadner, Grace Kelly, Jacqueline Kennedy, la duquesa de Alba, Luis Miguel Dominguín, Deborah Kerr, además de presidentes de estado o embajadores.

-- Deborah Kerr y Audrey Hepburn fueron dos de mis mejores amigas. Además de bellísimas, eras amables, sencillas y casi nunca hablaban de trabajo. Audrey no era muy sociable, pero sentía un amor sincero hacia el prójimo. Era honesta y con un gran sentido del humor.

-- "Ser agente secreto era un trabajo apasionante. Unas veces implicaba misiones peligrosas, y otras, más burocráticas. En Málaga, cuando estaba entregando unos clichés de fotos, me arrestaron y me llevaron a la cárcel. Mantuve este trabajo hasta que me casé. Un día antes de la boda, le dije a mi marido que era espía de la CIA".

En su casa de Madrid, en un luminoso salón con espejos italianos, muebles de estilo francés y colecciones de porcelana y marfil, Aline Griffith, condesa viuda de Romanones, ex agente...

La estadounidense Aline Griffith, condesa viuda de Romanones, ex agente de la CIA, desvela en sus memorias , “El fin de una era”, su trayectoria vital, en la que tuvo ocasión de tratar con personalidades como Jackie Kennedy , de quien dice que "era elegante, exquisita y gran conversadora".

DESTACADOS.

--Gracias a mi marido, entablé amistad con Audrey Hepburn, Ava Gadner, Grace Kelly, Jacqueline Kennedy, la duquesa de Alba, Luis Miguel Dominguín, Deborah Kerr, además de presidentes de estado o embajadores.

-- Deborah Kerr y Audrey Hepburn fueron dos de mis mejores amigas. Además de bellísimas, eras amables, sencillas y casi nunca hablaban de trabajo. Audrey no era muy sociable, pero sentía un amor sincero hacia el prójimo. Era honesta y con un gran sentido del humor.

-- "Ser agente secreto era un trabajo apasionante. Unas veces implicaba misiones peligrosas, y otras, más burocráticas. En Málaga, cuando estaba entregando unos clichés de fotos, me arrestaron y me llevaron a la cárcel. Mantuve este trabajo hasta que me casé. Un día antes de la boda, le dije a mi marido que era espía de la CIA".

En su casa de Madrid, en un luminoso salón con espejos italianos, muebles de estilo francés y colecciones de porcelana y marfil, Aline Griffith, condesa viuda de Romanones, ex agente...

La estadounidense Aline Griffith, condesa viuda de Romanones, ex agente de la CIA, desvela en sus memorias , “El fin de una era”, su trayectoria vital, en la que tuvo ocasión de tratar con personalidades como Jackie Kennedy , de quien dice que "era elegante, exquisita y gran conversadora".

DESTACADOS.

--Gracias a mi marido, entablé amistad con Audrey Hepburn, Ava Gadner, Grace Kelly, Jacqueline Kennedy, la duquesa de Alba, Luis Miguel Dominguín, Deborah Kerr, además de presidentes de estado o embajadores.

-- Deborah Kerr y Audrey Hepburn fueron dos de mis mejores amigas. Además de bellísimas, eras amables, sencillas y casi nunca hablaban de trabajo. Audrey no era muy sociable, pero sentía un amor sincero hacia el prójimo. Era honesta y con un gran sentido del humor.

-- "Ser agente secreto era un trabajo apasionante. Unas veces implicaba misiones peligrosas, y otras, más burocráticas. En Málaga, cuando estaba entregando unos clichés de fotos, me arrestaron y me llevaron a la cárcel. Mantuve este trabajo hasta que me casé. Un día antes de la boda, le dije a mi marido que era espía de la CIA".

En su casa de Madrid, en un luminoso salón con espejos italianos, muebles de estilo francés y colecciones de porcelana y marfil, Aline Griffith, condesa viuda de Romanones, ex agente...

La estadounidense Aline Griffith, condesa viuda de Romanones, ex agente de la CIA, desvela en sus memorias , “El fin de una era”, su trayectoria vital, en la que tuvo ocasión de tratar con personalidades como Jackie Kennedy , de quien dice que "era elegante, exquisita y gran conversadora".

DESTACADOS.

--Gracias a mi marido, entablé amistad con Audrey Hepburn, Ava Gadner, Grace Kelly, Jacqueline Kennedy, la duquesa de Alba, Luis Miguel Dominguín, Deborah Kerr, además de presidentes de estado o embajadores.

-- Deborah Kerr y Audrey Hepburn fueron dos de mis mejores amigas. Además de bellísimas, eras amables, sencillas y casi nunca hablaban de trabajo. Audrey no era muy sociable, pero sentía un amor sincero hacia el prójimo. Era honesta y con un gran sentido del humor.

-- "Ser agente secreto era un trabajo apasionante. Unas veces implicaba misiones peligrosas, y otras, más burocráticas. En Málaga, cuando estaba entregando unos clichés de fotos, me arrestaron y me llevaron a la cárcel. Mantuve este trabajo hasta que me casé. Un día antes de la boda, le dije a mi marido que era espía de la CIA".

En su casa de Madrid, en un luminoso salón con espejos italianos, muebles de estilo francés y colecciones de porcelana y marfil, Aline Griffith, condesa viuda de Romanones, ex agente...