06/03/2004 12:00 (UTC)
Como si de un Rey Midas mexicano se tratase, el escritor Alberto Ruy Sánchez ha convertido todo lo que toca en “deseo”, auténtico centro de su obra y esencia de una literatura en prosa tan cercana a la poesía que a menudo se confunde con ella.
El autor de la trilogía "Los nombres del aire", "En los labios del agua" y "Los jardines secretos de Mogador", a las que pronto se sumará un cuarto título, ambienta en Marruecos sus obras empeñado en encontrar los senderos perdidos que unen, como si de parientes lejanos se tratase, a México y al país magrebí.EN BUSCA DEL DESEO VIVO.La exploración comenzó hace casi treinta años, en 1976, cuando el autor mexicano estudiaba en París junto a Roland Barthes y viajó al desierto del Sahara y a la ciudad costera de Essaouira. Aquel escenario se convirtió en la ciudad imaginaria de Mogador, motor de sus ficciones y escenario de tres novelas, a las que seguirá una cuarta, que gravitan en una sociedad en la que conviven musulmanes, cristianos y judíos.“Lo que traté de hacer en el libro es, al hablar del sitio, evitar la dimensión sociológica para concentrarme en la emoción del deseo. ¿Por qué? Porque el deseo es el mismo en todas partes. Cuando hablo del deseo en Mogador estoy hablando del...
Como si de un Rey Midas mexicano se tratase, el escritor Alberto Ruy Sánchez ha convertido todo lo que toca en “deseo”, auténtico centro de su obra y esencia de una literatura en prosa tan cercana a la poesía que a menudo se confunde con ella.
El autor de la trilogía "Los nombres del aire", "En los labios del agua" y "Los jardines secretos de Mogador", a las que pronto se sumará un cuarto título, ambienta en Marruecos sus obras empeñado en encontrar los senderos perdidos que unen, como si de parientes lejanos se tratase, a México y al país magrebí.EN BUSCA DEL DESEO VIVO.La exploración comenzó hace casi treinta años, en 1976, cuando el autor mexicano estudiaba en París junto a Roland Barthes y viajó al desierto del Sahara y a la ciudad costera de Essaouira. Aquel escenario se convirtió en la ciudad imaginaria de Mogador, motor de sus ficciones y escenario de tres novelas, a las que seguirá una cuarta, que gravitan en una sociedad en la que conviven musulmanes, cristianos y judíos.“Lo que traté de hacer en el libro es, al hablar del sitio, evitar la dimensión sociológica para concentrarme en la emoción del deseo. ¿Por qué? Porque el deseo es el mismo en todas partes. Cuando hablo del deseo en Mogador estoy hablando del...
Como si de un Rey Midas mexicano se tratase, el escritor Alberto Ruy Sánchez ha convertido todo lo que toca en “deseo”, auténtico centro de su obra y esencia de una literatura en prosa tan cercana a la poesía que a menudo se confunde con ella.
El autor de la trilogía "Los nombres del aire", "En los labios del agua" y "Los jardines secretos de Mogador", a las que pronto se sumará un cuarto título, ambienta en Marruecos sus obras empeñado en encontrar los senderos perdidos que unen, como si de parientes lejanos se tratase, a México y al país magrebí.EN BUSCA DEL DESEO VIVO.La exploración comenzó hace casi treinta años, en 1976, cuando el autor mexicano estudiaba en París junto a Roland Barthes y viajó al desierto del Sahara y a la ciudad costera de Essaouira. Aquel escenario se convirtió en la ciudad imaginaria de Mogador, motor de sus ficciones y escenario de tres novelas, a las que seguirá una cuarta, que gravitan en una sociedad en la que conviven musulmanes, cristianos y judíos.“Lo que traté de hacer en el libro es, al hablar del sitio, evitar la dimensión sociológica para concentrarme en la emoción del deseo. ¿Por qué? Porque el deseo es el mismo en todas partes. Cuando hablo del deseo en Mogador estoy hablando del...
Como si de un Rey Midas mexicano se tratase, el escritor Alberto Ruy Sánchez ha convertido todo lo que toca en “deseo”, auténtico centro de su obra y esencia de una literatura en prosa tan cercana a la poesía que a menudo se confunde con ella.
El autor de la trilogía "Los nombres del aire", "En los labios del agua" y "Los jardines secretos de Mogador", a las que pronto se sumará un cuarto título, ambienta en Marruecos sus obras empeñado en encontrar los senderos perdidos que unen, como si de parientes lejanos se tratase, a México y al país magrebí.EN BUSCA DEL DESEO VIVO.La exploración comenzó hace casi treinta años, en 1976, cuando el autor mexicano estudiaba en París junto a Roland Barthes y viajó al desierto del Sahara y a la ciudad costera de Essaouira. Aquel escenario se convirtió en la ciudad imaginaria de Mogador, motor de sus ficciones y escenario de tres novelas, a las que seguirá una cuarta, que gravitan en una sociedad en la que conviven musulmanes, cristianos y judíos.“Lo que traté de hacer en el libro es, al hablar del sitio, evitar la dimensión sociológica para concentrarme en la emoción del deseo. ¿Por qué? Porque el deseo es el mismo en todas partes. Cuando hablo del deseo en Mogador estoy hablando del...
Como si de un Rey Midas mexicano se tratase, el escritor Alberto Ruy Sánchez ha convertido todo lo que toca en “deseo”, auténtico centro de su obra y esencia de una literatura en prosa tan cercana a la poesía que a menudo se confunde con ella.
El autor de la trilogía "Los nombres del aire", "En los labios del agua" y "Los jardines secretos de Mogador", a las que pronto se sumará un cuarto título, ambienta en Marruecos sus obras empeñado en encontrar los senderos perdidos que unen, como si de parientes lejanos se tratase, a México y al país magrebí.EN BUSCA DEL DESEO VIVO.La exploración comenzó hace casi treinta años, en 1976, cuando el autor mexicano estudiaba en París junto a Roland Barthes y viajó al desierto del Sahara y a la ciudad costera de Essaouira. Aquel escenario se convirtió en la ciudad imaginaria de Mogador, motor de sus ficciones y escenario de tres novelas, a las que seguirá una cuarta, que gravitan en una sociedad en la que conviven musulmanes, cristianos y judíos.“Lo que traté de hacer en el libro es, al hablar del sitio, evitar la dimensión sociológica para concentrarme en la emoción del deseo. ¿Por qué? Porque el deseo es el mismo en todas partes. Cuando hablo del deseo en Mogador estoy hablando del...
Como si de un Rey Midas mexicano se tratase, el escritor Alberto Ruy Sánchez ha convertido todo lo que toca en “deseo”, auténtico centro de su obra y esencia de una literatura en prosa tan cercana a la poesía que a menudo se confunde con ella.
El autor de la trilogía "Los nombres del aire", "En los labios del agua" y "Los jardines secretos de Mogador", a las que pronto se sumará un cuarto título, ambienta en Marruecos sus obras empeñado en encontrar los senderos perdidos que unen, como si de parientes lejanos se tratase, a México y al país magrebí.EN BUSCA DEL DESEO VIVO.La exploración comenzó hace casi treinta años, en 1976, cuando el autor mexicano estudiaba en París junto a Roland Barthes y viajó al desierto del Sahara y a la ciudad costera de Essaouira. Aquel escenario se convirtió en la ciudad imaginaria de Mogador, motor de sus ficciones y escenario de tres novelas, a las que seguirá una cuarta, que gravitan en una sociedad en la que conviven musulmanes, cristianos y judíos.“Lo que traté de hacer en el libro es, al hablar del sitio, evitar la dimensión sociológica para concentrarme en la emoción del deseo. ¿Por qué? Porque el deseo es el mismo en todas partes. Cuando hablo del deseo en Mogador estoy hablando del...
Story content:
El escritor mexicano Alberto Ruy Sánchez explora la literatura como una recreación de ambientes, con una prosa que está más cercana a la poesía que a la novela. Algunos críticos señalan que dicha tendencia procede de la tradición del “adab”, aquellos textos que son a la vez una narración y un poema
El escritor mexicano Alberto Ruy Sánchez explora la literatura como una recreación de ambientes, con una prosa que está más cercana a la poesía que a la novela. Algunos críticos señalan que dicha tendencia procede de la tradición del “adab”, aquellos textos que son a la vez una narración y un poema
El escritor mexicano Alberto Ruy Sánchez explora la literatura como una recreación de ambientes, con una prosa que está más cercana a la poesía que a la novela. Algunos críticos señalan que dicha tendencia procede de la tradición del “adab”, aquellos textos que son a la vez una narración y un poema
El escritor mexicano Alberto Ruy Sánchez explora la literatura como una recreación de ambientes, con una prosa que está más cercana a la poesía que a la novela. Algunos críticos señalan que dicha tendencia procede de la tradición del “adab”, aquellos textos que son a la vez una narración y un poema
La novela “Los nombres del aire”, del mexicano Alberto Ruy Sánchez, narra la historia de una mujer, Fatma, que rechaza a varios hombres porque busca un amor ideal, que descubrió con otra, la esclava sexual Kadiya. Explorar los sentimientos y deseos sexuales de las mujeres es fundamental en la obra.
La novela “Los nombres del aire”, del mexicano Alberto Ruy Sánchez, narra la historia de una mujer, Fatma, que rechaza a varios hombres porque busca un amor ideal, que descubrió con otra, la esclava sexual Kadiya. Explorar los sentimientos y deseos sexuales de las mujeres es fundamental en la obra.
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