La compañía de sanidad ambiental del Distrito Federal - CAESB, elige la impresión 3D para producir modelos y mejorar el mantenimiento de los sistemas

São Paulo, Brasil — 16 de octubre de 2018-- CAESB utiliza, desde marzo de este año, una solución de impresión 3D de Stratasys para fabricar productos de uso propio, obteniendo una reducción de costos, tiempo y mayor facilidad en la atención a sus demandas por piezas y moldes. Para adoptar la tecnología de impresión 3D, la CAESB invirtió R$ 368 mil en el proyecto. La impresora 3D elegida fue la Stratasys F370, indicada para la fabricación de artículos duraderos de alta complejidad y prototipado. El equipo es capaz de utilizar hasta cinco tipos diferentes de materiales; en CAESB, los más comúnmente utilizados son ABS, PC-ABS, TPU 92A y ASA.

Una de las principales aplicaciones de la impresión 3D en la empresa es la producción de modelos para fabricar moldes en arena para la fundición de piezas en metales utilizados en tuberías industriales. Anteriormente, la manufactura de este tipo de productos exigía el empleo de calderería, mecanizado y herramientas variadas, como taladros y tornos. “La impresión 3D ha disminuido el número de áreas de la empresa necesarias para la ejecución de un proyecto y el tiempo promedio de producción de un modelo pasó de dos días a 12 horas”, explica el Ing. Mecánico, Eduardo Burgos, colaborador de la Gerencia de Talleres e Industrialización de CAESB. “También economizamos en relación a los materiales utilizados. Otra ventaja es que ahora hacemos el modelo de plástico, y no de hierro, lo que disminuye el peso de los modelos manejados por los colaboradores involucrados en la operación", comenta.

El éxito del uso de la impresora 3D en la producción de modelos de moldes, llevó a CAESB a utilizar la impresora 3D Stratasys F370, también para la fabricación de piezas de uso final para equipos de alta complejidad, lo que no era posible cuando sólo estaban disponibles los métodos convencionales. Uno de estos equipos es una mini turbina dosificadora de productos químicos utilizada para el tratamiento del agua. “En el mercado, en promedio, este equipo se encuentra en el orden de los R$ 2.800. Para fabricar este producto por medio de impresión 3D, solamente gastamos unos R$ 30 en materiales. Además, pudimos imprimir las piezas del equipo ya con las especificidades requeridas para nuestra operación, lo que acortó el plazo para el inicio de su funcionamiento", explica Burgos.

"Para nosotros, que somos una empresa que además de desempeñarse en el área ambiental también trabaja con aplicaciones diferenciadas como moldes para fundición y equipos de alta complejidad, es muy gratificante ver los resultados que nos comprueban los beneficios de la adopción de la manufactura aditiva. "Casos como éste, desmitifican la tecnología y comprueban que puede tener aplicaciones reales y eficientes para los más diversos segmentos", celebra Juan Carlos Miralles, Sales Director de Stratasys para LATAM.

En un futuro próximo, los planes de la Compañía incluyen el uso de la impresora 3D en actividades de ingeniería inversa y en la producción de "modelos de sacrificio", piezas con características técnicas de alta complejidad. "El uso de la impresión 3D para la creación de moldes de sacrificio es aún poco explorado, por lo tanto, buscaremos innovar ese proceso”, concluye Burgos.

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