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24/01/2005 12:00 (UTC)
ECUADOR - QUI03 - QUITO (ECUADOR), 24/01/05.- Uno de trillizos prematuros, que diera a luz Omayra Samailín el pasado sábado 22 de enero en la capital ecuatoriana, permanece literalmente conectado a la vida gracias a diez cables, electrodos y sondas a través de los cuales, las enfermeras de la casa de salud del Patronato San José les alimentan y controlan sus signos vitales hoy, lunes 24 de enero, al sur de Quito (Ecudor)
Tras la muerte de la única niña de los tres, la familia necesita ahora 500 dólares para comprar los medicamentos especiales que requieren los niños para activar sus pulmones. EFE/Guillermo Legaria
